El domingo empecé a leer un libro del que anduve detrás, desde hace dos años; una amiga Tachirense me lo súper recomiendo, se trata de "La Bailarina de Auschwitz". Lo recibí en PDF, a través de un grupo tipo biblioteca virtual de moda por Whatsapp, que por cierto, muy útil para mí gusto.
Hoy quiero hacer referencia a algunos extractos que anoté en el cuaderno de resúmenes:
"Tenemos la capacidad de escapar de las prisiones que construimos en nuestras mentes y podemos elegir ser libres, sean cuáles sean las circunstancias de nuestra vida."
Y continúa narrando la escritora: "La guerra me había enseñado a percibir el peligro antes incluso de poder explicar qué me había asustado. Respiré profundamente y busqué una manera de empezar. Lo sucedido no puede olvidarse de mí ni cambiarse jamás. Pero, con el tiempo, he aprendido que puedo decidir cómo reaccionar ante el pasado. Puedo sentirme desgraciada o desesperanzada. Puedo sentirme feliz o deprimida. Siempre tenemos la posibilidad de decidir; la posibilidad de tener el control. He aprendido a decirme a mí misma, una y otra vez, hasta que la sensación de pánico empieza a remitir, que "estoy aquí. Esto es ahora". Cosas malas, le pasan a todo el mundo. Eso no lo podemos cambiar. Tu certificado de nacimiento en ningún sítio dice que la vida va a ser fácil. El sufrimiento es universal. Sin embargo, el victimísmo es opcional, procede del interior. Nadie puede convertirnos en víctimas, excepto nosotros mismos. No por lo que sucede sino porque decidimos aferrarnos a nuestra victimización."
Hoy en día están ocurriendo muchas cosas en nuestro alrededor: situación país, el Covid-19, las dos semanas de radicalización, dificultades económicas, muertes de seres queridos, de amigos, otras enfermedades, problemas en casa, desempleo, tristeza, angustia, pero hoy quiero pedirte que si estás atravesando por un mal momento, o alguien cerca de tí, que te adueñes de éstas palabras. Repásalas, saboréalas y compártelas. Prohibido que te quedes con ellas, hay mucha gente por ahí que la está pasando mal y necesita escuchar palabras alentadoras y de esperanza.
Culminó con esta cita, también de "La Bailarina de Auschwitz": "cuando ocultamos a la fuerza nuestra realidad y nuestra historia, los secretos pueden convertirse en trauma, en prisión. La libertad reside en aceptar lo sucedido. Armarnos de valor para desmantelar la prisión pieza a pieza." Desahógate con alguien que pueda escucharte con el corazón y que de verdad, quiera tu bien, sino, busca ayuda profesional, pero no te quedes con la amargura. Que luego, puedas decir: ¡Escapé de la prisión!.
Te deseo lo mejor. Bendecida semana.
Hasta el próximo lunes.
Marielisa Pacheco Montilla.
Licenciada en Psicología Mención Clínica.
Boconó Estado Trujillo.
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