Saludos paisanos, ahora mismo les escribo cómo periodista y ciudadano boconés, en primera persona, como pocas veces lo hago pero movido por la cantidad de mensajes recibidos en los últimos días.
De corazón les digo: Ya acompañamos a las familias de los fallecidos en la tragedia aérea de Portugesa en tan doloroso momento, les homenajeamos como nunca, nos enteramos del accidente de principio a fin, creo es hora de dejarlos descansar en paz, a ellos y a sus familiares; y si en algo como periodistas nos equivocamos, particularmente yo, les pido que nos disculpen; jamás la intención debe ser perjudicar o ser una carga negativa en medio del dolor, aunque a veces hayan noticias que sean duras decir, esas que aunque ustedes no sepan escribimos o narramos con lágrimas en los ojos.
Paisanos todos, les invito a dejar desde ya atrás especulaciones, comentarios mal sanos e incluso la difusión de fotos que no aporten nada positivo, mejor enfoquémonos en acompañar a cada familia (cumpliendo las medidas de bioseguridad) en las misas y rezos; incluso desde nuestras casas elevemos nuestra oración diaria para que esos hogares que seguro tienen un vacío insostenible encuentren en Dios un hombro donde conseguir consuelo y tomar fuerzas para seguir adelante, donde los recuerdos bonitos sean los que prevalezcan.
No nos quedemos con las imágenes del embalse de Portuguesa, mejor tomemos ese espíritu visionario y colaborador del ingeniero Marcaccio para construir ese Boconó que una vez en un memorable discurso dijo que soñaba, aprendamos de Moisés Selvi contagiándonos de esa alma alegre y cordial que le hizo cosechar decenas de amistades, mantengamos presente la buena voluntad y humildad de Euclides Quintero, siempre dispuesto a ayudar y nunca olvidemos para los días grises el entusiasmo, inocencia y la sonrisa del pequeño Habib.
Atentamente desde Caracas, un paisano que les quiere y también ha vivido días grises en medio de tan lamentables noticias: @BernardoLuzardo.
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