Pero es necesario que al sector empresarial se les dé las condiciones y la confianza necesaria para la inversión y de esta manera echar a andar la iniciativa privada y así la economía comience a mejorar para el bienestar del pueblo venezolano.
Es imprescindible que el gobierno deje tanta injerencia en el sector productivo, es decir, no más controles para que el área económica se libere y pueda haber márgenes de crecimiento.
Tambien es vital que el Ejecutivo Nacional ponga en funcionamiento las empresas estratégicas a su capacidad máxima instalada: las refinerías, las empresas ferromineras entre otras mediante créditos internacionales, o sea, pensar en grande, no solo en pequeñas y medianas industrias o fábricas artesanales dónde ellos pueden tener el control absoluto; así no se desarrolla una nación.
Lamentablemente el socialismo es una utopía, tal como lo concibe este gobierno y algunos otros de la región, el socialismo en su verdadera esencia es producir en abundancia riqueza para distribuir de forma equitativa y Venezuela cuenta favorablemte con todo ese potencial para hacerla una gran nación.
Escrito por Ramiro Montilla
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